jueves, 31 de enero de 2008

Libros guías de ocio y viajes con niños

Libros guías alternativas para la diversión en familia con los niños
Guía alternativa de ocio familiar
Una guía alternativa de ocio para que toda la familia pueda disfrutar de su tiempo libre con propuestas adecuadas para cualquier época del año, organizadas por estaciones y ajustadas a todo tipo de bolsillos. 100 ofertas de ocio distintas, divulgativas y originales, la mayoría desconocidas por el gran público. Ideas para cuando hace frío, llueve, nieva o el calor es sofocante, porque no hay mejor cosa que saber qué hacer en el momento que más lo necesitas.

Atienza es un pueblo de la sierra de Guadalajara que no tiene más allá de trescientos habitantes, en invierno, menos incluso, y que, sin embargo, ofrece al visitante hermosas iglesias, casas señoriales con escudos y nada menos que dos museos de arte religioso.
Por no hablar de su soberbio castillo....

nuestros hijos van a disfrutar: zoos y acuarios, planetarios, jardines botánicos, museos de la ciencia, o de motos, o de coches, y parajes naturales, parques de atracciones o parques acuáticos para los sofocantes días de verano. Se aconsejan los hoteles más adecuados, por sus características o por su precio, para viajar con la familia

Libros de vacaciones con niños y bebés

Guía esencial para viajar con niños por España
Todas las claves para convertir un viaje con niños en una experiencia inolvidable. Una guía que estimula la fantasía de los pequeños y sorprende a los adultos llevándoles a escenarios de leyendas. Incluye cientos de pistas para sacar el mayor partido a los itinerarios, disfrutar de trayectos divertidos, lugares fantásticos, parques temáticos y parajes naturales evocadores.

Viajar, conocer rincones del propio país, recorrer tierras lejanas, veranear en un ambiente distinto al habitual, etc., son actividades a las que se puede no renunciar cuando se tienen niños pequeños. Son suficiente ganas, organización y un poco de paciencia.
El libro ofrece una serie de ideas prácticas para afrontar y desarrollar muy diversos tipos de viaje con soltura.

Durante miles de años, los juegos se han transmitido de generación en generación y mantenido vivos gracias a sus jugadores. Este libro es una guía ideal tanto para descubrir nuevos juegos como para recordarlos. Incluye una enciclopédica variedad, desde clásicos como el dominó y el Monopoly, hasta desconocidos de otras partes del mundo, como el shogi o ajedrez japonés y el owari, juego de tablero africano.

En este libro se describen más de 500 lugares en los que nuestros hijos van a disfrutar: zoos y acuarios, planetarios, jardines botánicos, museos de la ciencia, o de motos, o de coches, y parajes naturales, parques de atracciones o parques acuáticos para los sofocantes días de verano. Se aconsejan los hoteles más adecuados, por sus características o por su precio, para viajar con la familia. Se incluyen además una serie de consejos prácticos fundamentales para quien se decida a recorrer nuestro país "con los niños a cuestas".

Turismo rural y niños son conceptos estrechamente asociados. La mayoría de los usuarios de casas rurales son familias que buscan un alojamiento con espacio y condiciones para disfrutar unas vacaciones tranquilas y seguras con los niños, en contacto con la naturaleza. Las casas también son adecuadas para un grupo de amigos. La presente guía ha tenido muy en cuenta estas circunstancias la hora de seleccionar las 181 casas rurales que la integran: todas las casas reseñadas se alquilan enteras y están suficientemente equipadas para el uso independiente de una familia o de un grupo, tienen un terreno propio en el que los pequeños pueden jugar sin peligro y ofrecen la posibilidad de realizar actividades deportivas, de aire libre o lúdicas en la misma casa o en sus alrededores.

Menor a bordo, el pasajero más débil

Los dispositivos de seguridad evitan el 90% de las lesiones en niños en caso de accidente de tráfico
MADRID.-Según datos de la DGT, durante el año 2005 las carreteras españolas registraron un balance total de 3.652 víctimas mortales por accidente, de las cuales, el 5% eran menores de edad. Tan sólo en la primera quincena de este mes han perdido la vida en la carretera ocho menores de 15 años, de los cuales tres eran bebés.

Además, en zonas urbanas se produjeron accidentes que acabaron con la vida de 790 personas, de las cuales 73 no habían cumplido los 18 años. Las cifras hablan solas, el 5,78% de las muertes, tanto en carretera como en ciudad, correspondieron a menores de edad. Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), más de 1.300 niños han perdido la vida en accidentes de tráfico durante los últimos ocho años.Éstos son la principal causa de muerte y lesiones permanentes en niños.

Con atención podemos darnos cuenta de que siempre empleamos la misma palabra: accidente. Pero si hay un niño sentado en las plazas traseras sin cinturón o una mujer con su bebé en brazos y éstos salen despedidos por la fuerza de un choque, no es exactamente un accidente.


Lesiones frecuentes
El Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) y Jané han elaborado un informe que demuestra que tres de cada cuatro niños que tienen que ser hospitalizados por colisiones de tráfico, no utilizaban sistemas de retención infantil (SRI).

Un impacto fuerte puede provocar innumerables y graves lesiones. En el 80% de los casos, las zonas más afectadas son la cabeza y cuello. Mientras que para un adulto la cabeza representa un octavo del peso total, para un niño representa una cuarta parte. Esto quiere decir que el 25% del peso de los niños se encuentra en la cabeza. Debido al escaso desarrollo de los músculos del cuello, éste no podría soportar un choque violento, pudiendo provocar lesiones en las vértebras y médula espinal.

El uso de SRI en niños menores de seis años ha pasado del 51,7% en 2003 al 87,5% en 2005 en las principales capitales de España. La Asociación Española de Pediatría afirma que, aún así, el 40% de los niños viaja sin las medidas de seguridad necesarias cuando éstas podrían evitar el 75% de las muertes y el 90% de las lesiones en las colisiones.

Una sillita o un capazo podrían evitar, además, los desprendimientos de vísceras, desgarros internos por la falta de musculatura abdominal, fracturas de costillas o lesiones de pulmón y de corazón. Es fundamental que los niños vayan sujetos al asiento del coche con un sistema adaptado al tamaño del mismo.

Desde hace años, todos los coches están adaptados a la nueva normativa del código de circulación que dictamina que "el hecho de no llevar instalado dentro del vehículo los elementos de seguridad tendrá la consideración de infracción". El asiento trasero es el lugar más seguro para un niño. Llevar a un bebé en brazos a una velocidad superior a los cinco kilómetros por hora es un peligo si existe un frenazo brusco.

Hasta los dos años, o los 10 kilogramos de peso, los niños deben ir sentados en sillitas orientadas en sentido contrario al de la marcha. Se ha demostrado que en caso de colisión, esta posición reduce más de un 30% las lesiones de cuello y cabeza en los bebés.

Con la entrada en vigor del carné por puntos llegó la normativa que obliga a utilizar dispositivos de seguridad hasta que el niño alcance una altura de 1,35 metros de altura. En este sentido, el próximo 20 de octubre también será obligatoria la colocación y uso de los cinturones de seguridad en los autobuses escolares de España.


Los Lunnis y McDonalds por la concienciación infantil
La Dirección General de Tráfico ha presentado junto con el programa infantil de televisión de Los Lunnis y con la multinacional McDonalds dos propuestas para concienciar a los más pequeños de la importancia del cinturón y los elementos de seguridad pasiva dentro de los coches.

TVE, aprovechando la I Semana Mundial de las Naciones Unidas, y siguiendo la línea educativa del programa, ha creado 13 episodios en los que los niños adquirirán consejos básicos sobre seguridad vial, desde cruzar la calle de forma adecuada con una mascota, hasta cómo sentarse correctamente dentro del coche.

Por su parte, McDonalds está en plena campaña. Bajo el lema ¡Haz click! la cadena norteamericana se centra en concienciar y fomentar en los niños la iniciativa de abrocharse el cinturón de seguridad. Desde los distintos establecimientos de la franquicia se distribuirán CD hasta finales de verano con varias canciones relacionadas con la seguridad vial.

Según Patricia Abril, presidenta de McDonalds España, "con esta campaña intentamos inculcar un hábito tan importante como el uso del cinturón, concienciando a los más pequeños y que sean éstos quienes recuerden a sus padres la importancia de hacer 'click'".

Seguridad vial infantil

Los padres son los únicos responsables de la seguridad de sus hijos
Según datos de Unicef, más de 20 mil niños entre 1 y 14 años de edad son víctimas mortales en accidentes de tráfico en países ricos, cada año. La encuesta concluye que eso se debe a que los niños no utilizan los sistemas de seguridad o lo hacen de manera incorrecta.
Para la Oficina del Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, y el Instituto Mapfre de seguridad vial, la mejor forma para la prevención de accidentes es la educación. Con buena información y concienciación, además del uso de sistema de seguridad infantil, la cifra de niños fallecidos en accidentes de tráfico podría reducirse en un 75 por ciento.
Los padres deben asumir que son ellos los únicos responsables de la seguridad de sus hijos cuando viajan en coche.


El ejemplo de los padres
Los niños aprenden por imitación de conductas, por lo que es imprescindible que sean los padres los primeros en dar el ejemplo. Si los hijos ven que sus padres se ponen el cinturón, ellos también harán lo mismo y no discutirán el uso de los sistemas de seguridad en cuanto entren al coche. Hay casos en que son los propios niños quienes advierten a sus padres cuando incumplen esta norma de tráfico. Por esta razón, es muy importante que los mayores tengan conductas lo más correctas posibles.


La responsabilidad de los padres
Está comprobado en un estudio que el 30 por ciento de los niños viaja incorrectamente protegido. Dado que los niños pequeños son totalmente dependientes de sus padres, cabe resaltar que son los padres los responsables de todo, y también por la mala utilización de los sistemas de seguridad infantil. Nunca se debe llevar a niños menores en tus brazos en el asiento delantero. Un niño sin sujeción adecuada, multiplica por cinco las posibilidades de sufrir lesiones mortales. El uso de sistemas de retención infantil (sillas o cojines elevadores), reduciría en casi un centenar el número de niños muertos cada año en España.


La conciencia de los conductores
Es necesario destacar la importancia de proteger a los niños. Que los conductores de los niños sean más conscientes en cuanto, por ejemplo, a la velocidad. Está físicamente demostrado que a una velocidad de 60 km/h, ningún brazo es capaz de retener a un niño de 18 kilos. En caso de una colisión frontal, su peso llegaría a ser de más de una tonelada.


Cada accidente, una lesión
Los accidentes de tráfico son la causa más frecuente de lesiones múltiples en los niños:
- Cuando un niño es atropellado puede sufrir un traumatismo craneoencefálico o vertebral, lesiones viscerales, o fracturas de extremidades.
- Cuando un niño está en un vehículo que se choca contra un poste o un árbol, o que se colisiona con otro coche, si lleva sistema de retención adecuado, podrá tener lesiones torácicas y abdominales. Si no lleva sistema de retención adecuado, podrá morir en el acto o sufrir un traumatismo craneoencefálico.
- Cuando un niño va en moto o bicicleta. Los menores que viajan con un adulto en una moto o en una bicicleta, aunque vayan en un asiento específico para ellos, sufren lesiones en las extremidades superiores e inferiores, incluyendo amputaciones de manos y pies.

Sillas de seguridad para bebés y niños

Los niños viajarán con más seguridad en el coche si usan sillas adecuadas
Un 75% de los accidentes de tráfico podría ser evitado si se usasen convenientemente los sistemas de seguridad diseñados especialmente para los más pequeños. Esos accidentes son, en la actualidad, la causa más frecuente de mortalidad infantil. Cada año en Europa se producen aproximadamente 1,1 millones de accidentes de tráfico con unos 1,6 millones de heridos (de los cuales 30.000 muertos).
A pesar de que la cifra se ha reducido a la mitad en la última década, en el año 2004 aún perdieron la vida 1.000 niños (menores de 16 años) a causa de accidentes de tráfico.
Según las estimaciones, aún hoy aproximadamente la mitad de los niños viajan en coche sin sillita, o con una sillita montada de forma incorrecta.
Queda claro que el único modo para proteger la vida de nuestros hijos es un uso más difundido y más consciente de las sillitas de auto.

La sillita de auto es el instrumento más idóneo para transportar al niño en coche, porque asegura la contención del mismo, su protección y una mejor retención en caso de accidente.
Esto se debe a que cada sillita, a pesar de tener medidas diferentes según el modelo, posee una estructura envolvente y proporcional a las dimensiones del niño, correas incorporadas para los más pequeños, protecciones específicas en caso de golpes laterales y acolchados estudiados para asegurar la mejor posición durante el viaje. El cinturón del coche por sí solo no es un instrumento adecuado y seguro para un niño, ya que ha sido diseñado para un pasajero adulto.

La mayor parte de las sillitas de auto ofrece la posibilidad de regular la forma y las partes de contención, según las fases de desarrollo del crecimiento del niño. Además de los correspondientes cojines-reductores, ideales para los niños más pequeños, y que se retiran cuando crecen, existen, según los tipos y los modelos disponibles en comercio, diversas soluciones que permiten regular la altura, la anchura y la inclinación (del respaldo, del reposacabezas y/o de los apoyabrazos). Estas regulaciones tienen el objetivo de asegurar al niño siempre la mejor protección en cada momento de su desarrollo.

Cómo elegir la silla
La elección de la silla de auto debe evaluarse en función del peso del niño. La normativa europea subdivide el peso en “Grupos de Peso”, es decir rangos de peso en los que se clasifican las sillitas de auto. Cada sillita se diseña, se homologa y se fabrica con este parámetro de referencia.
Grupo 0 desde el nacimiento hasta los 10 kg desde el nacimiento hasta los 9 meses aproximadamente
Grupo 0+ desde el nacimiento hasta los 13 kg desde el nacimiento hasta los 12 meses aproximadamente
Grupo 1 de 9 a 18 kg desde los 8 meses hasta los 4 años aproximadamente
Grupo 2 de 15 a 25 kg desde los 3 hasta los 6 años aproximadamente
Grupo 3 de 22 a 36 kg desde los 5 hasta los 12 años aproximadamente.

Novedades en CHICCO
Con el propósito de seguir apostando por la seguridad y el confort de los más pequeños, Chicco lanza este año la silla Key 1 Isofix, la más actual y moderna gracias a su nuevo sistema de anclaje Isofix. Innovador y con un mecanismo totalmente seguro y homologado, este sistema fija, de una forma muy cómoda, la silla en el asiento del vehículo convirtiéndola en parte integrante de la propia estructura del automóvil. Además, la silla ofrece tres puntos de sujeción para garantir la máxima retención y protección en caso de accidente. Esta silla pertenece al Grupo 1, para niños de 9 a 18 kg. Para regular las correas y el reposacabezas, ofrece seis opciones disponibles de regulación, que puede ser accionado presionando un botón. Sus refuerzos diferenciados garantizan comodidad y protección en los puntos más delicados del niño como la cabeza, la zona lumbar, las piernas y los brazos. El respaldo es abatible en cinco posiciones. Los cojines son suaves tapizados con una red transpirable que permiten a los más pequeños descansar con toda tranquilidad.

Bebés en la playa

No es recomendable llevar los bebés a la playa en sus primeros meses de vida
Nada mejor que estar a la orilla del mar para refrescarse durante el verano. Además de atenuar el calor, es relajante y muy estimulante para los niños. Pero todo debe estar bien medido. Si eres de los que gustan estar todo el día en la playa, tomar mucho sol, y ahora tienes un bebé, la playa no es el destino adecuado. Los bebés menores de seis meses no pueden pisar la playa. A ellos no hay que exponerles nunca al sol directo. Los de pocos meses es mejor que no vayan a la playa, porque aunque estén bajo una sombrilla, el simple reflejo del sol puede provocarles quemaduras a
de sol ya que su piel es muy sensible.


Horario limitado para bebés en la playa
A los mayorcitos, es decir, los de a partir de 8 meses, se les puede llevar a la playa pero dentro de un horario limitado. Por ejemplo, de 9 a 10 y media de la mañana y por la tarde después de las 5 horas. Así les estarás protegiendo de los rayos de sol más dañinos y peligrosos. Pueden mojar sus piecitos en el mar si lo desean y jugar con arena, pero no le pierdas de vista por si lleva algo a la boca.

Los niños pequeños disfrutan mucho jugando con la arena pero procura que estén en todo momento bajo una sombrilla. La arena también refleja las radiaciones. Por esta razón, mantenga a tu hijo siempre vestido con una camiseta de algodón y una gorra. Si tu hijo ha jugado por la mañana en la playa, es conveniente que antes o después de almorzar, el niño descanse y eche una siesta. Por la tarde, podéis elegir un paseo distinto en lugar de volver a la playa.


Cuidados a la orilla del mar con los niño y bebés
Para los que optaron por irse a la playa con niños pequeños, hemos seleccionado algunos consejos que os servirá de orientación a la hora de "bucear" en el mundo del mar.
1- No es aconsejable llevar a bebés menores de 6 meses a la playa, mismo porque a los bebés de esta edad no se les puede aplicar crema protectora. Podría causarles reacciones alérgicas. A partir de los seis meses tendrías que hacer una prueba:aplicar la crema en la cara interna del antebrazo y observar si la tolera bien.
2- Usar crema protectora en los bebés y niños. Elegir una crema con un fator protector superior a 30 y que sea resistente al agua. Extenderla por todo el cuerpo, incluidas la nuca, los pies, mans, y orejas, por lo menos media hora antes de ir a la playa. No olvidarse de renovarla con frecuencia.
3- Si vas de paseo con tu hijo, no te olvides de llevar siempre una sombrilla colgada a la sillita, y un gorrito bien puesto en su cabeza.
4- Viste a tu hijo con ropa muy ligera, de algodón.
5- Seria conveniente que llevaras siempre una botellita de agua para tu hijo. Los niños pequeños se pueden deshidratar fácilmente. Los más pequeños, los lactantes ya estarán hidratados con solo ofrecerles leche (de pecho o biberón). Para garantizarles un agua fresquita, una buena idea es llevar una pequeña nevera portátil. En ella podrás llevar también algo de fruta y/u otra cosa refrescante.

Sillas de seguridad para bebés y niños

Los niños viajarán con más seguridad en el coche si usan sillas adecuadas
Un 75% de los accidentes de tráfico podría ser evitado si se usasen convenientemente los sistemas de seguridad diseñados especialmente para los más pequeños. Esos accidentes son, en la actualidad, la causa más frecuente de mortalidad infantil. Cada año en Europa se producen aproximadamente 1,1 millones de accidentes de tráfico con unos 1,6 millones de heridos (de los cuales 30.000 muertos).
A pesar de que la cifra se ha reducido a la mitad en la última década, en el año 2004 aún perdieron la vida 1.000 niños (menores de 16 años) a causa de accidentes de tráfico.
Según las estimaciones, aún hoy aproximadamente la mitad de los niños viajan en coche sin sillita, o con una sillita montada de forma incorrecta.
Queda claro que el único modo para proteger la vida de nuestros hijos es un uso más difundido y más consciente de las sillitas de auto.

La sillita de auto es el instrumento más idóneo para transportar al niño en coche, porque asegura la contención del mismo, su protección y una mejor retención en caso de accidente.
Esto se debe a que cada sillita, a pesar de tener medidas diferentes según el modelo, posee una estructura envolvente y proporcional a las dimensiones del niño, correas incorporadas para los más pequeños, protecciones específicas en caso de golpes laterales y acolchados estudiados para asegurar la mejor posición durante el viaje. El cinturón del coche por sí solo no es un instrumento adecuado y seguro para un niño, ya que ha sido diseñado para un pasajero adulto.

La mayor parte de las sillitas de auto ofrece la posibilidad de regular la forma y las partes de contención, según las fases de desarrollo del crecimiento del niño. Además de los correspondientes cojines-reductores, ideales para los niños más pequeños, y que se retiran cuando crecen, existen, según los tipos y los modelos disponibles en comercio, diversas soluciones que permiten regular la altura, la anchura y la inclinación (del respaldo, del reposacabezas y/o de los apoyabrazos). Estas regulaciones tienen el objetivo de asegurar al niño siempre la mejor protección en cada momento de su desarrollo.

Cómo elegir la silla
La elección de la silla de auto debe evaluarse en función del peso del niño. La normativa europea subdivide el peso en “Grupos de Peso”, es decir rangos de peso en los que se clasifican las sillitas de auto. Cada sillita se diseña, se homologa y se fabrica con este parámetro de referencia.
Grupo 0 desde el nacimiento hasta los 10 kg desde el nacimiento hasta los 9 meses aproximadamente
Grupo 0+ desde el nacimiento hasta los 13 kg desde el nacimiento hasta los 12 meses aproximadamente
Grupo 1 de 9 a 18 kg desde los 8 meses hasta los 4 años aproximadamente
Grupo 2 de 15 a 25 kg desde los 3 hasta los 6 años aproximadamente
Grupo 3 de 22 a 36 kg desde los 5 hasta los 12 años aproximadamente.

Novedades en CHICCO
Con el propósito de seguir apostando por la seguridad y el confort de los más pequeños, Chicco lanza este año la silla Key 1 Isofix, la más actual y moderna gracias a su nuevo sistema de anclaje Isofix. Innovador y con un mecanismo totalmente seguro y homologado, este sistema fija, de una forma muy cómoda, la silla en el asiento del vehículo convirtiéndola en parte integrante de la propia estructura del automóvil. Además, la silla ofrece tres puntos de sujeción para garantir la máxima retención y protección en caso de accidente. Esta silla pertenece al Grupo 1, para niños de 9 a 18 kg. Para regular las correas y el reposacabezas, ofrece seis opciones disponibles de regulación, que puede ser accionado presionando un botón. Sus refuerzos diferenciados garantizan comodidad y protección en los puntos más delicados del niño como la cabeza, la zona lumbar, las piernas y los brazos. El respaldo es abatible en cinco posiciones. Los cojines son suaves tapizados con una red transpirable que permiten a los más pequeños descansar con toda tranquilidad.

Evitar los mareos y vómitos en viajes con niños y bebés

Cómo evitar los mareos, vómitos, malestares en los viajes con niños y bebés
Es muy común en viajes largos en coche que los niños se encuentren mareados en algún momento. Se marean más en el coche que en un avión, por ejemplo. Esas indisposiciones suelen afectar más a niños mayores de 2 años y constituyen malestares al niño, preocupaciones para los padres, y un riesgo de despiste e incluso de accidente durante el viaje.
Existen niños más y menos susceptibles a los mareos. Hay niños que a solo 30 Km del camino empiezan a vomitar y no páran. Pero todo eso no es motivo para que canceléis el viaje tan esperado.


Consejos para evitar los mareos, vómitos, malestares en los viajes en coche con niños y bebés.
1- Si el niño es muy pequeño, lo mejor es consultar al pediatra antes de emprender un viaje en coche. Solo él podrá administrar algún producto que pueda reducir los mareos del niño.
2- En caso de niño mayores, es decir, a partir de los 3 años, se les puede dar algún caramelo o chicle que evitan mareos.
3- Intente que el niño se fije en las cosas, paisajes, detalles, del camino. Juega con él al "veo veo", a trabalenguas, adivinanzas,... o a cualquier otra actividad que le haga olvidarse del mareo.
4- Entreténgale poniendo alguna música infantil y lo anime a que cante y hable. Cuéntale cuentos.
5- Evite que el niño lea.
6- Mantenga el coche aireado. No fume durante el viaje.
7- Haga una parada cada dos horas para que todos puedan estirar las piernas y renovar el aire.
8- No des de comer al niño antes del viaje. Eso puede sobrecargar su estómago. Es preferible que él coma alimentos secos y ricos en hidratos de carbono. Y que no tome bebidas gaseosas ni leche
9- Durante el viaje, si el niño tiene hambre, ofrézcale alguna galleta, chuchería, pero poca cosa.
10- En caso de que el niño vomite, hágale beber pequeñas cantidades de agua azucarada, con frecuencia.
11- Si el niño se duerme, esté preparado con bolsas a mano, por si él se despierta con ganas de vomitar.
12- Si el niño devuelve, no te pongas nervioso. No ayudará a que se mejore la situación.
Con estos cuidados, podrás disminuir el riesgo de los mareos

Viaje seguro. El mejor medio de transporte para los niños

Vacaciones seguras con los niños
A la hora de elegir el medio de transporte, no te olvides de una cosa: cuanto más pequeño un niño más daño puede sufrir si ocurre un accidente. Por ello, antes de iniciar un viaje se deben tomar medidas preventivas como habilitar correctamente el espacio destinados a los más pequeños. No olvides que los accidentes de tránsito son la principal causa de muerte o invalidez por accidentes en niños.

La seguridad es esencial en los viajes en carretera. Para ello, hay que tener en cuenta algunas precauciones en el caso de que viajes con tu bebé en coche.


Seguridad en los viajes en coche con los bebés
- Es muy importante hacer paradas con frecuencia. El viaje será mas tranquilo, y tanto los niños como los adultos podrán estirar las piernas y descansar su postura.

- Use siempre el asiento de seguridad en el asiento trasero. Si tu hijo se encuentra molesto, pare un poco pero no viaje con tu hijo fuera del asiento de seguridad.

- Todo niño menor de 4 años debe viajar en una silla de seguridad debidamente homologada para el coche. Si el niño pesa menos de 9,5 Kg. y mide menos de 65 cm debe viajar en una silla que mire hacia atrás. La silla se fija al coche con el cinturón de seguridad. Llevar los niños en brazos el impacto de un choque puede arrancar al niño de tu regazo y puede arrojarlo contra el parabrisas o fuera del coche.

- Todo niño menor de 12 años debe viajar en el asiento trasero, y usar cinturón de seguridad como cualquier adulto.

- No use una silla de seguridad que está diseñada para mirar hacia atrás, mirando hacia delante.

- Evite dejar objetos libres en el coche que puedan, en una frenada o golpe, caer sobre el bebé. Es conveniente que los tenga en el maletero o por el suelo del coche.

- Si vas a viajar solo con tu bebé, es decir, sin acompañantes, coloque el asiento de seguridad en el centro del asiento trasero, de modo que, en caso de robos o accidentes, la ruptura de los vidrios de las ventanillas traseras afecten en menor grado al bebé.

- Comprobar que los bloqueadores de seguridad de las puertas traseras están en la posición adecuada para que los niños no las puedan abrir desde dentro. Las ventanillas deben estar cerradas puesto que existe el riesgo de que los niños se asomen o arrojen objetos que podrían causar un accidente. Y la bajada del coche debe ser siempre por la puerta más próxima a la acera.

- Para evitar los mareos infantiles en carretera, los expertos aconsejan una buena ventilación y comida ligeras durante el viaje.

- Para evitar que los niños se aburran o se sientan agobiados y molesten al que conduce, lleve cintas de audio (casetes) para que escuchen sus músicas favoritas durante el viaje.

- Si has elegido un medio de transporte público es recomendable que optes por asientos donde el espacio sea más ancho para permitir más movilidad a los peques, y preferentemente que estén situados al lado de la ventana.

- Y la regla más importante: delante de cualquier situación de conflicto, busque mantener el sentido del humor . Eso es lo mas recomendable para empezar un viaje.

Consejos para los viajes en familia

Los niños no deben ser un obstáculo a la hora de planear un viaje de vacaciones
Uno o más niños pequeños no deben representar un dolor de cabeza a la hora de planear las vacaciones de la familia. Muchos padres, preocupados por lo que supuestamente pueda pasar durante el viaje cuanto al equipaje, al comportamiento de los niños, a la estancia, etc., optan por quedarse en casa, lo que tampoco es la solución. Si pensáis en salir algunos días a la montaña o a la playa con sus hijos, ¡adelante! Los niños no tienen por qué ser una limitación para viajar. Recuerda que para todo existe un remedio y una solución. Lo importante es mantener la ilusión, adoptar algunas precauciones, organizarse, y divertirse mucho. Las vacaciones son para relajar y dejar de lado tantas reglas que tenemos que seguir normalmente. Si os planteáis seguir con los planes de viaje, aquí tenéis algunos consejitos para ayudaros.


Qué llevar y lo que no se puede olvidar en los viajes en familia
El equipaje debe ser preparado con tiempo, por lo menos unos 10 días antes del viaje. Podéis ir separando todo lo que habitualmente no lo usáis. Tenéis que llevar:
- Cuna de viaje (en el caso de que sea un bebé).
- Un termo (pequeño o grande dependiendo de la cantidad de hijos que tengáis).
- Calienta biberones (si tenéis un bebé).
- Gorros.
- Chupetes.
- Un juguete preferido de cada niño.
- Toallas de baño, jabón, peine, cepillo, colonia, crema hidratante, crema protectora para el sol, pañales, toallitas húmedas, bolsas plásticas, baberos.
- Botiquín de medicinas: con medicamentos antipiréticos, analgésicos, tiritas, alcohol, agua oxigenada, termómetro, tijeras, gasas, algodón, esparadrapo, vitaminas.
- Tarjeta de la Seguridad Social o de vuestro seguro médico privado, junto con la cartilla de vacunación del bebé.
- Ropas: es aconsejable que pongan un conjunto para cada día en la malea. La ropa de bebés y de niños no abulta tanto y ahorrarás en lavado.


Viaje en coche con toda la familia
Si es vuestro caso, conviene que llevéis agua, alguna cuchara, una gorra y una chaqueta, un cambiador, pañales y toallitas. Llevéis también un cuento, un juguete, un cojín, canciones infantiles para animar a los niños, además de algo de comer. Si algún hijo siente náuseas no os olvidéis de medicarlo antes. Si usáis el aire acondicionado abran las ventanas algunas veces para renovar el aire. Es necesario que paréis cada dos horas. Es aconsejable que todos se estiren las piernas y se distraigan con otras cosas. Procure salir lo más temprano que puedas para avanzar mientras los niños se duermen.
Para que los niños se distraigan durante el trayecto, críen situaciones de juego colectivo. Canten con ellos, cuéntales cuentos, jueguen con adivinanzas, trabalenguas, o simplemente cuelgues algunos móviles en el asiento trasero para que juegue con ellos.


Viaje en avión con los hijos
Si es vuestro caso, deberán llevar lo imprescindible para cambiar, dar de comer o de beber a los niños. Lleven también algo de medicina, y no os olvidéis de comentar al pediatra por si algún niño tenga otitis. Algunas compañías aéreas tienen preparados asientos para llevar pequeñas cunas para bebés, y otras ofrecen juegos especialmente diseñados para niños pequeños y grandes.


Viaje en tren con niños y bebés
No hay nada más agradable para los niños que un viaje en tren. Dará pinceladas de aventura al viaje de la familia, y será muy cómodo y placentero para los padres. Si utilizáis un coche-cama podréis dormir todos tranquilamente, incluso por la noche. Y los niños tendrán más libertad de movimiento.


Adonde dormir en los viajes con niños y bebés
Para quiénes tienen hijos muy pequeños, bebés, lo mejor y más cómodo es optar por alquilar apartamentos o casas. Si los niños son mayores, con más de 3 años, una casa rural puede ser muy interesante. Un plato lleno de curiosidades y placeres. Y si os gusta la aventura, el camping puede representar la opción ideal. A los niños les iban a gustar muchísimo. Tendrían más libertad para jugar, conocer e aprender.

En un hotel, si la familia es grande, será más complicado acomodar a todos juntos. Sin embargo, existen algunas cadenas hoteleras que, considerando las vacaciones de familias numerosas, ya están ofreciendo opciones que facilitan el turismo para estas familias. Ofrecen servicios de guardería y de animación, instalaciones apropiadas para los más pequeños, e incluso actividades según la edad de los niños, además de una alimentación especial. Consultéis a un agente de viaje y veréis que la oferta es grande en este sentido

La elección del destino para viajar con bebés y niños

El mejor destino para ir de vacaciones con bebés y niños
Viajar con niños puede ser muy divertido si los padres controlan todos los detalles del viaje, con anterioridad. Las vacaciones en familia aumentan a cada año y en general lo que los padres quieren es divertirse con sus hijos, acercarse mas a ellos, sea por una, dos, o mas semanas. Deben estar concientes de que la realidad y las vacaciones son temporadas completamente diferentes.


Consejos para que las vacaciones con los hijos sean un éxito
- Lo primero, elegir el destino. Para ello, hay que considerar las limitaciones naturales de un niño. Cuanto mas pequeño el niño mas dificultades tendrá, por ejemplo, de caminar mucho, de subir y bajar, de moverse de una forma general. Así que no es recomendable que opten por escalar montañas, hacer senderismo, o algo por el estilo. Elija un lugar apropiado a la edad de tu hijo. Un lugar mas bien tranquilo, donde puedan pasar días moderados, donde puedan parar a descansar y comer bien. Un lugar de playa o de montaña siempre es favorable en ese sentido. No hay nada mas gratificante para un niño que el contacto con la naturaleza, con la arena, la tierra, el mar...

- A la hora de elegir las actividades, reserve siempre alguna exclusivamente para los niños.

- Para el hospedaje, un apartamento o condominio puede que sea la mejor solución para una familia, ya sea por el ahorro o por gozar de mayor privacidad.

- Al llegar a su destino, deje que los niños se familiaricen con las áreas que irán utilizar durante el periodo de las vacaciones. Que conozcan la piscina, el parque mas próximo, las zonas de entretenimiento, etc. Aprovecha para determinar el horario para cada actividad, y con quien estarán acompañados. Las actividades en las vacaciones también deben estar bien determinadas y establecidas.

- Si el viaje está marcado para fechas de gran transito, haga las reservas con la debida anticipación y no te olvides de confirmarlas el día anterior. Así evitará estar mas tiempo del necesario en el aeropuerto con el bebé. Asegúrese de que el billete sea expedido por una empresa aérea que no esté de huelga o con otros problemas.

- Durante el viaje atraiga la atención de tu hijo con folletos ilustrativos del lugar adonde irán. Explique lo que podrán hacer, visitar, etc. Eso le llenará de expectativas, ánimo, y seguridad.

Qué llevar en los viajes con niños y bebés

Qué llevar en la maleta en las vacaciones con niños y bebés
¿Qué es lo que tengo que llevar? Esa es la gran preocupación de los padres a la hora de preparar las maletas.

Primero hagan una lista de todas las cosas que necesita para vosotros y para vuestro bebé.. Luego, hay que pensar en el clima del lugar adonde os vais de vacaciones. Importantísimo a la hora de elegir las ropas adecuadas. Pero si os vais a un lugar de calor, es conveniente que lleve algo de frío por si las temperaturas descienden algo.

Si posible, llevar un teléfono móvil para llamadas urgentes, y tengas preparados algunos teléfonos de contacto del lugar de destino, como por ejemplo, el del ambulatorio medico local.

La documentación deberá estar en manos. No te olvides de llevar la cartilla de la Seguridad Social o del seguro médico que tengas. En el caso de los bebés, llevar también la cartilla de vacunaciones y el teléfono del pediatra. Y llevar siempre un botiquín.


Botiquín de viajes con niños y bebés
- Compresas de gasa estéril.
- Algodón.
- Esparadrapo.
- Tiritas.
- Termómetro.
- Agua oxigenada.
- Analgésicos.
- Pomadas para picaduras,
- Suero fisiológico.
- Protector solar.

Para los que van de viaje con bebés, es aconsejable que el equipaje sea completo. Una cuna portátil es de buena utilización. Y no olvidarse de llevar algunos chupetes de reserva, así como manguitos, sombreros y chanclas adecuados.

Vacaciones con bebés

Recomendaciones para vacaciones con los bebés
Cuando el acompañante es un bebé, todo cuidado es poco cuanto a la seguridad, la salud, y los cuidados en general. Lo primero, es visitar al pediatra y preguntarle sobre las medicaciones necesarias, si las vacunas están al día, y asegurarse de que el bebé goza de salud.

Si habéis elegido el avión como medio de transporte, es necesario que comuniquéis a la compañía aérea que os vais de viaje con un bebé. Y que os situéis en los asientos delanteros ya que ofrecen más espacio. Si el vuelo es de larga distancia, es conveniente solicitar a la compañía una cuna especial para bebés que deberá ser acoplada a la pared delante de sus asientos. Además, estén atentos a las recomendaciones de la tripulación del vuelo. Y para evitar la presurización de los oídos nada mejor que dar de mamar al bebé o el chupete. Durante el viaje, traten de entretenerle y darle de beber mucho liquido para controlar la temperatura corporal. No se olvide de cambiar los pañales a su bebé antes de ingresar al avión. No olvide llevar en su bolso toda la alimentación necesaria para el bebé. Los potitos son lo más cómodo. Además nos os olvidéis de las medicinas, de sus juguetes preferidos, algo de abrigo, pañales, toallitas, etc.


Viajes en coche con el bebé
Si habéis elegido el coche, es importante que entretengas a tu bebé cuando esté despierto. Lleve juguetes y pare cada una o dos horas de viaje para que tu bebé cambie de ambiente y no se canse. Cuéntele cuentos y cante las canciones preferidas de tu bebé para que no se aburra. No te olvides que algunos bebés sienten mareos cuando viajan en coche. De ese modo, lleve siempre una bolsa plástica para posibles vómitos. Y no te pases con el aire acondicionado o la calefacción. Trate de respetar los horarios de comida y sueño del bebé.

Los viajes con niños y bebés

Cómo preparar un viaje con niños pequeños
Las vacaciones se acercan... y estaréis contando los días para disfrutarlas a tope. Pero ahora sois padres de familia y eso lo cambia todo. Ya no podéis lanzaros a las aventuras de antes. Y la responsabilidad irá muy delante de vuestros planes. Pero no os desaniméis. Unas vacaciones con niños requieren más cuidados y atenciones, pero no por eso deben convertirse en algo aburrido e incómodo.

El mundo de los niños es divertido y está lleno de sorpresas. Sólo hace falta preparación, control de la situación, buen humor, y mucha paciencia, para que la diversión y el descanso estén asegurados.


Viajar con bebés y niños
Viajar con niños puede resultar una locura para aquellos padres que no están acostumbrados a ello o para los que no han planificado correctamente sus vacaciones, considerando que sus acompañantes más pequeños requieren una atención, servicios y precauciones especiales. Los más pequeños de la familia son personitas muy inquietas que se aburren con facilidad. Hay que prepararles con antelación, dejarles que participen en la organización del viaje, preguntarles sobre los juguetes que desean llevar, etc.

Para unas buenas vacaciones en familia, guiainfantil.com preparó una serie de consejos sobre el equipaje, el destino, el medio de transporte elegido, sobre lo que se debe llevar y qué cuidados se debe tener.

Campamentos de verano para los niños

Un campamento económico, seguro, educativo, limpio, y que supra las necesidades de los niños
Las vacaciones escolares traen satisfacciones pero también preocupaciones. Como cada año, muchos padres no saben qué hacer con sus hijos durante las vacaciones escolares ya que estas superan en días a sus vacaciones laborales. Cuando son pequeños muchas familias optan por la guardería, una cuidadora, e incluso por la casa de los abuelos, tíos, etc. Pero cuanto más mayores son los niños más difícil es satisfacerles. Sus exigencias también crecen y ellos necesitan de más actividades. Y es ahí donde muchos padres optan por los llamados y conocidos campamentos de verano. Y es ahí también donde aparecen preguntas como ¿es seguro?, ¿Nuestro hijo está preparado? ¿Qué cuidados tendrán para que nuestro retoño regrese sano y salvo?

No existe el campamento perfecto. El mejor campamento es el que más agrade a tu hijo. Algunos niños estarán más contentos en grupos pequeños. Otros preferirán los grupos grandes. A algunos niños les gusta la rutina, pero otros prefieren nuevas aventuras cada día. Algunos elegirán actividades atléticas mientras otros optarán por actividades manuales. Antes de enviar a tu hijo a un campamento, hable con él, conozca sus deseos, sus gustos, y busque la mejor opción que se adapte a las expectativas familiares y a tu hijo o hija.


Recomendaciones para elegir un campamento de verano para los niños
Antes de enviar a tu hijo a algún campamento, valora su situación personal. Busca enterarte acerca de sus habilidades, su madurez, sus preferencias y necesidades. Si esta será su primera experiencia fuera de casa, y no bajo las miradas de sus padres, haga lo posible para que él disfrute y vuelva contento. El miedo de enviarle a estas actividades es normal. Las noticias de accidentes relacionadas a los campamentos son frecuentes. Es normal que los progenitores desconfíen a la hora de dejar a sus hijos en manos de extraños, lejos de casa, durante una, dos o tres semanas. Pero si eso sirve de consuelo, según los expertos, estas actividades contribuyen decisivamente a la maduración del pequeño, estimulan su autonomía y su responsabilidad, fortalecen sus vínculos con el entorno, contribuyen a que el pequeño aprenda a convivir con otras personas, y ayudan a desarrollar sus habilidades sociales. Si habéis decidido enviar a vuestro hijo a un campamento, más vale que os informéis al máximo acerca del programa de actividades, del lugar, de las instalaciones, del personal que os irá a acompañar, etc. Así os encontraréis todos más tranquilos. No os olvidéis de que una elección bien calculada y pensada es vital para que el campamento sea una buena experiencia infantil.


Qué esperar y demandar de los campamentos de verano
Los padres necesitan un campamento que sea económico y esté en un lugar conveniente, que ofrezca un ambiente seguro y educativo, fiable, limpio, y que esté abierto cuando tú lo necesites. Los niños necesitan un campamento para hacer amigos, construir relaciones personales con adultos confiables, desarrolle pasatiempos e intereses, refine sus habilidades, y tenga tiempo para jugar y relajarse.
Los padres deben tener en cuenta que los campamentos de calidad:
1- Sean limpios, seguros, cómodos.
2- Tengan licencias de funcionamiento.
3- Dispongan de personas con formación, cuidadosas y confiables.
4- Tengan una variedad de actividades que complementen las habilidades escolares de los niños, y les animen a tomar buenas decisiones.
5- Tengan una filosofía de entendimiento, respeto, y comprensión hacia los niños.
6- Consideran la importancia de los padres y el seguimiento del programa.
7- Ofrezcan informaciones acerca del traslado, alojamiento, actividades y excursiones que serán desarrollados durante la estancia del niño.
8- Exijan un certificado médico y una referencia detallada acerca de los cuidados que necesitan el niño. Si son asmáticos, alérgicos, celíacos, diabéticos, o tengan problemas de sueño, de conducta o de alimentación.
9- Deben especificar las habilidades que harán parte del programa de actividades. Se debe evitar, por lo menos en campamentos de niños más pequeños, los deportes de riesgo o que presenten alto grado de competitividad.
10- Deben contar con un botiquín de auxilios básicos y personal con conocimientos para atender posibles problemas de picaduras, cortes, golpes, diarrea, fiebres, vómitos, catarros, etc.
11- Dispongan de personal médico especializado para atender a algún caso grave de salud que pueda ocurrir, y que el lugar del campamento ofrezca una salida rápida, si necesario, a un centro hospitalario.

La colaboración de los hijos en las vacaciones

Cómo los niños pueden colaborar en las tareas de casa, durante las vacaciones
Los encargos o pequeñas tareas domésticas son un eficaz medio de educar para la convivencia. Y las vacaciones, la época propicia para poner en marcha un plan de acción familiar. Pero no se trata simple y llanamente de repartir tareas y luego regañar si no las sacan adelante: asignar y supervisar encargos también es un arte porque implica saber qué y a quién encargar algo. Existen gustos y capacidades personales. Asigne las tareas pensando cuál puede ser más educativa para cada hijo según su carácter y aptitudes personales.

Es importante demostrar que las tareas de la casa no son responsabilidad de las mujeres sino de todos los que viven en ella.

No caiga en la tentación de remunerar los encargos o establecer un cierto tipo de trueque: si recoges tu toalla, podrás salir a patinar con tus amigas. Al contrario, motívelos con frases como "Somos un equipo", "Lo que hagas o dejes de hacer afecta a los demás", "No al hotel - Sí al hogar", "No ayudo por cumplir sino por servir", que puede escribir en una cartulina a la vista de todos o de cada uno... Cada familia tiene su estilo y en algunos hogares estos lemas pueden causar mucha risa. Para los hijos "chistosos" o burlones es infalible el lema de una abuela: "el que no coopera, no come".

Encargos y tareas a los hijos para las vacaciones
Que lo pueda hacer el hijo solo, que sea periódico y que sea supervisable.
Los encargos no son para aliviar la carga de los padres ni para aprovechar el tiempo libre de los hijos; son para hacerlos más fuertes para enfrentar la vida.
Los realiza cada hijo, siempre y todos los días:
- Hacer su cama.
- Ordenar la habitación y el baño.
- Ordenar sus juguetes, ropa y escritorio.
- Avisar los desperfectos de su ropa y pedir ayuda para arreglarlos (coser el botón, comprar un parche para el pantalón).
- Sí come fuera del horario familiar, limpiar lo que se ensució, lavar y guardar.
- Apagar las luces que no se usan.
- Guardar el vídeo que vio, el disco que escuchó, el diario que leyó.

Tareas diárias para los hijos
Se distribuyen entre los hermanos y pueden cambiarse a la semana o cada quince días.
- Ayudar a confeccionar el menú de comidas.
- Poner y sacar la mesa.
- Poner el pan y el agua, el jugo.
- Aliñar las ensaladas.
- Ayudar con el aseo (en una tarea concreta: vaciar los basureros, pasar el paño de sacudir, pasar la aspiradora...
- Contestar el teléfono.
- Regar las plantas.
- Ordenar las sillas.
- Poner el canasto de la ropa sucia y luego llevarlo al lavadero.
- Apagar luces y poner llaves a las puertas.
- Regar el jardín.
- Cuidar y alimentar al perro, gato o canario.
- Recoger el correo.
- Bajar y subir persianas.
- Organizar la cocina.
Encargos semanales para los niños
También se distribuyen entre los hermanos, pero como no hay que hacerlos todos los días, son de más larga duración:
- Sacar la basura.
- Poner papel higiénico en los baños.
- Juntar diarios o botellas viejas para desechar.
- Revisar lo que falta en la despensa.
- Hacer el menú semanal.
- Distribuir la ropa del planchado sobre cada cama.

Actividades infantiles para las vacaciones

La vacaciones son la ocasión ideal que eñ niño desarrolle nuevas habilidades
Las fiestas se acercan y las vacaciones ya están a la vuelta de la esquina. A partir de ahora los niños estarán más tiempo en casa y eso puede representar un poco de inquietud para los padres que tendrán a su cargo la distracción de sus hijos. Llegarán llenos de energía, y con personalidades e intereses distintos y, por lo tanto, lo mejor es prepararnos. Las vacaciones son una ocasión ideal para aumentar su diversión, afianzar sus progresos y desarrollar nuevas habilidades.
Hemos preparado algunas orientaciones generales para que todos os paséis muy bien en estas vacaciones, pero ante todo, es necesario que no olvidéis de tres reglas básicas.


Reglas báscicas de las actividades infantiles
1- Propóngale actividades con aire de juego.
2- Alégrese con los logros, avances y mejoras de tu hijo, demostrándole.
3- Anímale a concluir objetivos y, cuando lo consigas, premíale con una actividad especial (cine, paseos, excursión, etc)


Desarrollo Motriz del niño y bebé
- Natación- anima a tu hijo a nadar.
- Juegos que estimulen las habilidades motoras (bicicleta, pelotas, comba y cuerda)
- Dibujar (animales, cuentos, momento familiar y paisajes).
- Colorear con distintos tipos de pintura (lápiz de color, cera, témpera).
- Recortar y punzar (revistas, fotos, papel de seda, cartulina, rollos de papel higiénico).
- Modelar plastelinas, masa de pan y arcilla.
- Montar en bicicleta sin los ruedines.
- Aprender a caminar en patines.
- Caminar, correr y saltar, por la playa y, campo
- Jugar al "Corro".
- Caminar en contacto con la naturaleza.


Actividades infantiles para el desarrollo Intelectual del los niños y bebés
- Hablar mucho con los padres, amigos, familiares, vecinos, haciendo hincapié en: escuchar; esperar turno para intervenir; pedir por favor, saludar; pronunciar las palabras correctamente; formar frases bien estructuradas; relatar hechos e acontecimientos.
- Escuchar cuentos o historias.
- Escuchar música.
- Leer imágenes (para aumentar su vocabulario).
- Leer cuentos sencillos.
- Inventar, dibujar y escribir (poesías, cuentos, cartas a los amigos).
- Adornar folios usando variados materiales.
- Jugar a la "cadena" de palabras. Ejemplo: a un grupo de tres o más niños, uno dic una palabra, el siguiente dice la palabra del anterior y añade otra, etc. Va abandonando el juego el niño que no consiga añadir palabras nuevas.
- Jugar al ahorcado.
- Jugar al "Veo-Veo".
- Inventar frases de 3, 4, 5, o más palabras.
- Jugar a emparejar cartas o fichas.
- Jugar con los números.
- Jugar a parchís, la oca, las tres en raya, dominó, y a otros juegos de mesa.
- Montar un puzzle gigante entre todos de la familia
- Dormir mucho.
- ¡Ser y estar feliz!!.


Actividades infantiles para desarrollo social del los bebés y niños
- Mantener y cuidar el contacto de los niños con otros amigos o compañeros.
- Jugar con otros niños.
- Acercar a los niños a otros miembros de la familia con los que normalmente no tienen contacto.
- Conocer gente nueva y hacer nuevos amigos.

Cómo preparar un viaje con niños pequeños

Los viajes con niños y bebés
Cómo preparar un viaje con niños pequeños
Las vacaciones se acercan... y estaréis contando los días para disfrutarlas a tope. Pero ahora sois padres de familia y eso lo cambia todo. Ya no podéis lanzaros a las aventuras de antes. Y la responsabilidad irá muy delante de vuestros planes. Pero no os desaniméis. Unas vacaciones con niños requieren más cuidados y atenciones, pero no por eso deben convertirse en algo aburrido e incómodo.

El mundo de los niños es divertido y está lleno de sorpresas. Sólo hace falta preparación, control de la situación, buen humor, y mucha paciencia, para que la diversión y el descanso estén asegurados.


Viajar con bebés y niños
Viajar con niños puede resultar una locura para aquellos padres que no están acostumbrados a ello o para los que no han planificado correctamente sus vacaciones, considerando que sus acompañantes más pequeños requieren una atención, servicios y precauciones especiales. Los más pequeños de la familia son personitas muy inquietas que se aburren con facilidad. Hay que prepararles con antelación, dejarles que participen en la organización del viaje, preguntarles sobre los juguetes que desean llevar, etc.

Para unas buenas vacaciones en familia, guiainfantil.com preparó una serie de consejos sobre el equipaje, el destino, el medio de transporte elegido, sobre lo que se debe llevar y qué cuidados se debe tener.

martes, 29 de enero de 2008

Este cuento enseña a que los niños ayuden a los demás

Había una vez un elefante llamado Bernardo que nunca pensaba en los demás. Un día, mientras Bernardo jugaba con sus compañeros de la escuela, cogió a una piedra y la lanzó hacia los demás. La piedra golpeó al burro Cándido en su oreja, de la que salió mucha sangre. Cuando las maestras vieron lo que había pasado, inmediatamente se pusieron a ayudar a Cándido. Le pusieron un gran curita en su oreja para curarlo. Mientras Cándido lloraba, Bernardo se burlaba, escondiéndose de las maestras.

En la tarde de otro día, Bernardo jugaba en el campo cuando, de pronto, le dio mucha sed. Caminó hacia el río para beber agua. Al llegar al río vio a unos venados que jugaban a la orilla del río. Sin pensar dos veces, Bernardo tomó mucha agua con su trompa y se las arrojó a los venados. Gilberto, el venado más chiquitito perdió el equilibrio y acabó cayéndose al río, sin saber nadar. Afortunadamente, Felipe, un venado más grande y que era un buen nadador, se lanzó al río de inmediato y ayudó a salir del río a Gilberto. Felizmente, a Gilberto no le pasó nada, pero tenía muchísimo frío porque el agua estaba fría, y acabó por coger un resfriado. Mientras todo eso ocurría, lo único que hizo el elefante Bernardo fue reírse de los venados.

Una mañana de sábado, mientras Bernardo daba un paseo por el campo y se comía un poco de pasto, pasó muy cerca de una planta que tenía muchas espinas. Sin percibir el peligro, Bernardo acabó hiriéndose en su espalda y patas con las espinas. Intentó quitárselas, pero sus patas no alcanzaban arrancar las espinas, que les provocaba mucho dolor. Se sentó bajo un árbol y lloró desconsoladamente, mientras el dolor seguía. Cansado de esperar que el dolor se le pasara, Bernardo decidió caminar para pedir ayuda. Mientras caminaba, se encontró a los venados a los que les había echado agua. Al verlos, les gritó:
- Venados, por favor, ayúdenme a quitar esas espinas que me duelen mucho.
Y reconociendo a Bernardo, los venados les dijeron:
- No te vamos a ayudar porque lanzaste a Gilberto al río y él casi se ahogó. Aparte de eso, Gilberto está enfermo de gripe por el frío que cogió. Tienes que aprender a no herirte ni burlarte de los demás.
El pobre Bernardo, entristecido, bajo la cabeza y siguió en el camino en busca de ayuda. Mientras caminaba se encontró algunos de sus compañeros de la escuela. Les pidió ayuda pero ellos tampoco quisieron ayudarle porque estaban enojados por lo que había hecho Bernardo al burro Cándido. Y una vez más Bernardo bajo la cabeza y siguió el camino para buscar ayuda. Los espinos les provocaban mucho dolor.

Mientras todo eso sucedía, había un gran mono que trepaba por los árboles. Venía saltando de un árbol a otro, persiguiendo a Bernardo y viendo todo lo que ocurría. De pronto, el gran y sabio mono que se llamaba Justino, dio un gran salto y se paró enfrente a Bernardo. Y le dijo:
- Ya ves gran elefante, siempre has lastimado a los demás y, como si eso fuera poco, te burlabas de ellos. Por eso, ahora nadie te quiere ayudar. Pero yo, que todo lo he visto, estoy dispuesto a ayudarte si aprendes y cumples dos grandes reglas de la vida.
Y le contestó Bernardo, llorando:
- Sí, haré todo lo que me digas sabio mono, pero por favor, ayúdame a quitar los espinos.
Y le dijo el mono:
- Bien, las reglas son estas:
La primera es que no lastimarás a los demás porque no quieres que te lastimes.
La segunda es que ayudarás a los demás y los demás te ayudarán cuando lo necesites.
Dichas las reglas, el mono se puso a quitar las espinas y a curar las heridas a Bernardo. Y a partir de este día, el elefante Bernardo cumplió, a rajatabla, las reglas que había aprendido.

FIN

(Este cuento nos fue enviado por Javier Moreno Tapia, México

Este cuento está basado en una historia real. La de una perrita llamada Shiva

Me llamo Shiva, soy una perrita color canela. Soy muy inteligente porque voy a la escuela.
Cuando era muy chiquita me separaron de mi mamá. Estaba muy enferma y no me podía cuidar. Sola anduve por la calle, entre la gente y nadie me podía ayudar. Pasé frío, hambre, sueño y miedo en tanto andar. Un día de mucha lluvia torrencial, me escondí del mundo, y mis ojos lloraron entre los truenos y sólo le pedía a la vida una familia que cuidara de mí y me quisiera tanto como yo las querría si la tuviera conmigo. Tiritaba de frío y me puse enferma. Empecé a perder mi pelo y me picaba todo el cuerpo.

Al salir de mi cobijo la gente me miraba y salía huyendo. Pude ver mi imagen en un escaparate y la verdad daba miedo: flaca por el hambre, sucia, mojada y con poco pelo.

Esta historia que parece triste no lo es, porque después de tanto vagar, sufrir y llorar, con una familia dulce me crucé, y ellos en mis padres se convirtieron, a pesar de no ser perritos como yo.
En la actualidad soy una perra mimada, de pelo sedoso y con una cola como un plumero llena de pelos. Soy tan feliz como una perdiz al ser un integrante de esta familia de humanos, tanto que a veces hasta me olvido de ladrar, pero no me importa porque con caricias y besos me sé comunicar.
He viajado mucho, cruzado el océano en avión, he ido a la montaña, perseguido patitos en el lago para jugar, palomas en la plaza para asustar, he corrido en valles entre ovejas, he ido a la playa y nadado con las olas en el mar. Mi momento preferido es salir a pasear al parque y revolcarme en el césped.

He conocido mucha gente, he hecho amigos perritos en cada sitio que hemos visitado y nunca me faltó cobijo, mimos, un techo calentito, comida, risas, juegos, amor y seguridad.
No importa cuan duro haya sido un momento de mi vida, lo importante es que hoy conozco la felicidad, la vida me supo escuchar y una familia me regaló y yo como no soy tonta lo supe valorar, y con alegría disfrutar.
FIN

(Este cuento es de autoría de Florencia Moragas, argentina residente en España).

El perro del establo. Cuentos infantiles

En un establo cerca de un gran pastizal vivían 30 vanidosas vacas y un pastor alemán. Todos los días las vacas muy seguras de que eran muy importantes para su dueño mecían sus colas mirándose largos ratos unas a otras antes de hacer caso al perro que animado daba de brincos para llevarlas a pastar.
Luego, sin mucha prisa, salían calmadas como haciendo favores, y pasito a paso iban a comer. El perro brincaba mostrando el camino, corriendo, ladrando, y diciendo a las vacas por donde llegar al gran pastizal. "Por aquí señoras! Por aquí!" . " Vamos, apúrense que ya es hora de llegar", ladraba el perrito, "Señoras en fila para cruzar el riachuelo". Las vacas miraban al perro con ojos de burla "Nosotras somos importantes, somos las vacas, damos leche a nuestro amo así que nosotras marcamos el paso, no este perro tonto que esta hecho de saltos, carreras y no da nada al amo".

Todos los días era lo mismo, las vacas miraban al perro desde lo alto, mientras el perro trataba de ordenarlas a su paso entre carreras, ladridos y animados saltos. Una noche, al llegar al establo, el perro agotado se echó al costado y escucho a las vacas burlarse de su trabajo, "Ese perro inútil cree que nos lleva y no sabe que nosotras lo llevamos hasta nuestro pasto ja, ja, ja ". Se reían haciendo escándalo "Quien necesita a ese perro flaco?" Esa noche, el perro se durmió llorando.

Al amanecer el perro decidió no seguir pastando a aquellas vacas vanidosas y se fue en busca de otros animales más agradecidos que reconocieran su trabajo. Cuando fue la hora de salir al pasto las vacas meneaban sus rabos esperando que llegara el perro flaco brincando y ladrando para salir de nuevo al campo, pero no escucharon ladridos ni vieron saltos. Solo se escuchaba al amo llamando "¡Tarzán!, ¡Tarzán!!! Donde estas?" Pasó la mañana y sus grandes estómagos comenzaron a rugir. Las vacas esperaban ya poder salir, pero vieron luego que el amo molesto sólo les traía heno. "Y que ha pasado de nuestro paseo?", decían las vacas mientras comían rumiando, "Es que el perro inútil se olvidó de nosotras que somos importantes, por seguir durmiendo?" y así las vacas pasaron el día burlándose, riéndose y criticando al perro.

Al día siguiente por no salir al campo las vacas vanidosas se estaban aburriendo, pero una vez más no escucharon los ladridos del inútil perro, solo vieron al amo trayéndoles heno, "Creo que hoy tampoco al campo saldremos", " Si creo que esos ricos pastos ya deben estar creciendo y nosotras aquí acaloradas nos quedaremos", decían las vacas mientras rumian su heno. En lo que quedaba de día, las vacas siguieron discutiendo, por quien tenía la culpa de la huída del perro "Es que fue tu culpa por no apurarte", "No, fue la tuya por no formar fila" " No, fue tuya por mojarte en el arroyuelo cuando veníamos de regreso" … Se culpaban unas a otras sin encontrar al responsable.

Pasó un día más y las vacas ya cansadas se resignaron a su encierro. A no salir al campo y a mugir su aburrimiento, cuando de pronto una de las vacas dijo con gran suspiro: "Extraño al perro", "Sí, yo extraño sus ladridos", " y yo sus saltos de contento", "y yo extraño el que nos pasee dando ordenes como de sargento", ".ah pero era bueno el perro, nos sacaba temprano sin importarle el frío, calor o la lluvia de invierno", " Sí, siempre pensó en nosotras y en nuestro alimento, en conseguirnos pasto y del más tierno". Y en ese tercer día las vacas entristecieron y no dieron leche pues de tristeza casi no comieron.

El jilguero del roble que crecía al costado del establo oyó los lamentos de las vacas tristes y fue a buscar al perro. Voló todo el día buscando y buscando y al final de la tarde encontró al perro, echado al costado de un hormiguero con el hocico picado y con cara triste. "Al fin te encuentro perro. Te he estado buscando por todo el campo" dijo el jilguero "¿Para que me buscabas? Preguntó el perro", "Para que vuelvas al establo" respondió el jilguero. "Allí no me necesitan!", respondió el perro. "Esas vacas vanidosas no me quieren ni respetan, y yo no quiero eso, por eso me fui a buscar otros rebaños. Fui donde las abejas, me picaron, y ni caso me hicieron, siguieron volando a las flores que quisieron; fui donde los patos traté de dirigirlos en el agua pero nadar es demasiado cansado para un perro; fui luego donde unos gusanos que encontré en un árbol, pero caminaban muy lento, y por más que yo ladrara, al día siguiente eran mariposas, salieron, volaron, y se fueron muy lejos. Ahora estoy aquí tratando de decirles a estas hormigas donde ir, pero pasaron sin mirarme, les ladre, les brinqué y solo esquivaron mi pata y siguieron adelante".
"Por eso debes regresar" dijo el jilguero, "las vacas están tristes, ya ni leche pueden dar desde que te fuiste", "ayer las escuché decir que te extrañaban y que si tu regresabas nunca más de ti se burlarían", "Eso dijeron?" se alegró el perro, y partió rumbo al establo, ladró y brincó, sin dejar de mover el rabo.

A la mañana siguiente las vacas escucharon los ladridos sonoros, se arreglaron temprano para salir al pasto, y el perro contento las llevó ladrando diciendo "Señoras, buen día, nos vamos al campo", se hicieron amigos y nunca más pelearon. Y el jilguero tranquilo pudo dormir sin burlas, sin culpas ni quejas en el roble al costado del establo.

(Cuento enviado por Patricia Gallegos Tejada - Perú

El bebé elefante

Soy el oso hormiguero, y les voy a contar una historia única. Si les digo que en el zoológico había una excitación y un revuelo poco común, no les miento... a pesar de mi larga nariz.

Nacía el primer día de otoño, mientras las hojas decoraban las calles, transformándolas en mullidos ríos dorados.
El sol asomaba, todavía con un poco de sueño. Mientras se desperezaba, cumplía con su diaria tarea de iluminar la vida.
Y hablando de vida y de iluminar... todos los animales estábamos esperando al nuevo integrante de la familia de los paquidermos.
Justamente HOY era el día de llegada del nuevo pequeñín.
La gente hacía cola para ver al bebé recién nacido. En la entrada del zoológico había largas filas de chicos para votar el nombre que le pondríamos.
Mi jaula, que estaba justo frente al terreno de los elefantes, me permitía observar todo lo que allí ocurría, casi sin perder detalle.

Pasó el tiempo, y Júnior, así lo habíamos llamado al bebé que hoy ya tiene 5 años, veía que era un tanto diferente de sus padres. La trompa no le crecía, su boca era enorme y llena de dientes, arrastraba la panza al caminar y tenía una larga y robusta cola.
- Mamá -, decía el pequeño, - me da la sensación que no me parezco demasiado a ustedes... que soy muy diferente. -

Dos días transcurrieron con la inquietante pregunta de Júnior, hasta que una tarde, cuando la gente ya se había marchado, los orgullosos papás elefantes se sentaron a charlar con su pequeño hijo.
Entonces le explicaron que como mamá no podía tener elefantitos en su panza, habían decidido adoptar un bebé... y tuvieron la suerte de tenerlo a él. Que es un tanto diferente, es cierto... después de todo había salido de la panza de una "cocodrila". Pero a quién podía importarle si tenía orejas grandes o casi invisibles...?
Después de todo y con todo, un hijo es un hijo tal como es, y se lo conoce por el corazón y no por el color o la forma.

"El amor es el único capaz de decidir quién es hijo de quién."

El elefantito con aspecto de cocodrilo, se quedó pensando un buen rato. Luego, miró a sus padres y les dijo:
- Mami, papi,... ahora sí que los quiero mucho más que antes.-
Desde mi jaula, pude entonces ver un nuevo milagro. Mientras Júnior dormía, comenzó a crecerle una pequeña y hermosa trompita. Y que a nadie le quepa duda, que esta transformación era debido al fuerte sentimiento de amor que unía a esta gran familia.

Ustedes se preguntarán como es que yo sé tanto de esto... Bueno, les diré que la familia de este oso hormiguero que les habla, está formada por un papá oso gris y una mamá panda.

El sol comenzó a esconderse dejando que la luna se refleje en el lago de los flamencos rosados... el silencio absorbió el bullicio de la multitud, y el otoño siguió su camino hacia el no tan frío invierno del Jardín zoológico.

FIN

La vaca soñadora

Había una vez en un campo de Santa Fe, una vaca soñadora, que no veía las horas, para que pase el tren. Será talvez, por su aire de grandeza, es que movía su cabeza, para verlo pasar. Todos los días la misma historia, para ella seria la gloria, si algún día podría viajar. Conocer Buenos Aires, los teatros y las revistas. Y conseguir alguna entrevista con algún galán de novela, ese hombre que tanto la desvela y lo ve solo por la tele. Ella no lo podía fingir tanto nervio que sentía, su televisión.

Como soñar no cuesta nada, todas las noches le pedía a su hada, que se hiciera realidad. Por esas cosas del destino o a lo mejor fue respuesta a sus pedidos, es que el tren un día paró, por desperfecto de la maquina y frente al campo se quedó. La vaca soñadora no lo podía creer y le pidió con tanta fe a su santo San Roque, ¡Por favor que hoy me toque! y le inviten a subir. El corazón le latía, mientras se despedía de las demás. Y así partió la vaca rumbo a la gran ciudad, sentada en soledad por la ventanilla saludaba, a sus amigas le tiraba besitos de despedida, prometiéndoles regresar. Mucho tiempo pasó, nadie supo mas de ella, quizás ya sea una estrella, que triunfa en Buenos Aires y de nosotras se olvidó.

Pero un día el tren paró, en el campo de Santa Fe, y no podían creer cuando ella se bajó. Estaba distinta, estaba delgada y de las piernas le colgaba unas cadenas importantes y aunque no era como antes, sus amigas la querían igual y con gran algarabía la salieron a encontrar. Ya hablaba distinto, hablaba aporteñada, decía que añoraba a sus amigas de la infancia y con tantas ansias volvió a su campo natal. Contaba con lagrimas en los ojos que no pudo cumplir sus sueños ni antojos y que por caminar en una avenida estuvo presa en Buenos Aires. ¡Esto sí que es vida! ¡Esto es tranquilidad! Aquí en mi campo puedo caminar, aunque arrastrando mis cadenas. No será Buenos Aires, pero sí, es un Aire Distinto, si se vive en libertad.
FIN

El Dragón y Rasputín

En lo alto de una colina, en un lejano país, se alzaba un hermoso castillo al que nadie quería ir. Miedo no sino ¡PAVOR! Sentían sus habitantes cuando miraban allí, y oían aullidos y lamentos que no les dejaban dormir.

Cierto día, Rasputín, un muchacho espabilado, curioso, y un tanto osado, quiso probar a subir al castillo. Caminó colina arriba y conforme me iba acercando,… cierto miedo sí sentía, pero nada que no se esfumara silbando y canturreando. Al encontrarse ya arriba, admirando tan bello lugar, en su infantil cabecita pensaba: "¿Qué mal me puedo encontrar?"
Llamó despacito a la puerta pues no quería molestar. Y al no obtener contestación entró sin contemplación. Recorrió largos pasillos, atravesó una gran sala, y allí, acurrucado en un sillón chiquitito se escondía ¡Un pequeño dragoncito!

Rasputín se quedó helado. Entonces de eso se trataba. Era aquella criatura quien se lamentaba y lloraba. - ¿Qué te pasa dragoncito? ¿Tienes hambre? ¿Tienes frío? - Tengo miedo de estar sólo, contestó el dragoncito muy apenado. Y continuó Rasputín: - ¿Y por qué no sales al mundo? Este es un bello país. Sí vivieras con nosotros te sentirías feliz. Y contestó el desolado dragoncito, gimiendo: - Porque yo asusto a la gente. Soy feo, peludo y gris.

Rasputín lo agarró despacio, le acarició, y le dijo: - Ni una palabra más. Vendrás conmigo y verás que al conocerte todo el mundo te querrá. Y en efecto así fue que el dragón creció feliz, en aquel bello país.
FIN
(Este cuento nos fue enviado por Rosa Herrera - España

Mariposita Caprichosa. Cuentos infantiles

La Mariposita tenía un lindo color amarillo. Un día, mientras volaba entre las flores vio una mariposa azul; regresó donde estaba su mamá y le dijo: Mami, mami, vi una mariposa azul. ¿Y qué? preguntó mamá mariposa. "Que yo quiero ser azul", dijo Mariposita. La mamá pintó las alas de su hijita de un lindo color azul, que enseguida salió a lucir al jardín.

Ah! Pero entonces vio una mariposa color naranja, y la historia se repitió. Mariposita quiso tener alas de color naranja; la mamá la complació de nuevo, pintando sus alas de color naranja.

Al otro día temprano, mariposita voló y voló, luciendo nuevo color en sus alas. Y de esta vez más allá del jardín. Y se encontró con un grupo de mariposas blancas. De inmediato voló a casa. "Mami, mami. Ya no quiero este color, quiero ser blanca, como unas mariposas que vi hoy", rogó la mariposita. Y la mamá, de inmediato, lavó las alas de la pequeña y las pintó de un blanco reluciente.

Pero sucedió que mariposita estaba tan oronda con su nuevo color, que no se dio cuenta de que llegaba una fuerte lluvia. Se refugió en un árbol, porque las mariposas nunca dejan que la lluvia las moje. Pero el viento era muy fuerte, y la pequeña mariposita no pudo evitar que le cayeran unas cuantas gotas desprendidas de las hojas del árbol.

¿Saben lo que pasó entonces? Que las alas de mariposita empezaron a desteñirse, a tomar todos los colores que su mamá le había pintado, aunque no aparecía su lindo color amarillo.
Cuando regresó a su casa, mariposita estaba muy fea. Su mamá casi no la conoció. "Ves, hijita. Esto te ha pasado por caprichosa. Debiste estar feliz, contenta con tu color y no andar queriendo parecerte a otras mariposas." La pobre mariposita lloró un montón. Estaba arrepentida. Creyó que nunca volvería a lucir el lindo color amarillo de sus alas.
La mamá la dejó llorar, hasta que fue a ayudarla, le limpió las alas hasta que se vió aquel amarillo que parecía oro. Desde entonces, mariposita no volvió a tener caprichos tan tontos, y aprendió a quererse a ella misma, fuera como fuera.
FIN

La cigueña María. Cuentos infantiles

Era una vez una joven pero valiente cigüeña que pese a su juventud se aventuró a emprender un largo viaje y cumplir con su primera tarea, llevar a una preciosa niña a los brazos de su mamá.
Preparó todo para tan atrevida aventura, y una mañana empezó un largo camino desde los cálidos vientos del sur hacia los fríos de las estepas rusas. Vivió toda clase de aventuras, le sorprendieron tormentas, nieves, e incluso un feroz ataque de una águila que confundida, no llegó a comprender la hermosa labor que había comenzado la joven cigüeña.

Pese a todo, y ya malherida y tiritando de frío, vio las heladas aguas del río Volga, y en vertiginoso descenso, puso a la niña en el dulce regazo de un moisés que pese a su humildad, sería un cálido lugar donde mecerla y dejarla a los cuidados de su mamá. Tras un breve descanso, y sintiéndose en una tierra extraña, emprendió el largo viaje de vuelta hacia su hogar, una antigua torre donde en un hermoso nido le esperaba su familia, la que se sentiría orgullosa de a pesas de su tierna juventud, haber terminado con éxito la bella labor para que las cigüeñas habían sido creadas. Así, repetidamente, cumpliría con otros viajes a alejadas partes del mundo donde madres y padres esperaban la deseada llegada de sus bebés.

Se sentía orgullosa con la tarea que la naturaleza le había concedido, aunque con tristeza escuchaba a veces las viejas historias que cigüeñas más experimentadas contaban de bebés que no siempre eran felices en los lugares donde con tanta ilusión los habían dejado. En la pequeña aldea de la estepa, y en su camita de madera se encontraba nuestra hermosa Tania. Ya había mucho tiempo que nuestra amiga la cigüeña María la trajo, pero sus ojos estaban tristes y, junto al frío, empezó a darse cuenta que no tenía una buena mamá.

Pasaron varios años y su vida no cambiaba. Estaba abandonada la mayoría de los días y apenas su vieja vecina Ivana, por lástima, le daba algún cariño y mimo, así como la poca comida que alimentaba su frágil cuerpecito. Un día, creyendo que en un vaso había leche, se lo tomó, pero el vaso contenía pintura, y el pequeño cuerpo de Tania se enfermó. Por suerte se curó. Y para que no estuviera más solita, la llevaron a un orfanato donde la cuidarían junto a otros niños y niñas que no tenían a sus papás y mamás. Allí tuvo a sus primeros amigos, y empezó a veces a reír, pero ella lo que quería era tener un papá y una mamá.
Cuando cumplió cuatro años, una familia que deseaba tener una hija vino a verla. Después de jugar con ellos los besó y, por primera vez, sus pequeños y sonrosados labios dijeron las bellas palabras papi y mami.

Un día salió radiante del orfanato y después de un largo viaje, igual como el que en su día hizo la cigüeña María, fue feliz en una hermosa casa, llena de muñecos, juguetes, y del amor de su papá y mamá. La sonrisa de su carita y la alegría de sus ojitos expresaban a todos su felicidad. Ya no sintió más frío, y el sol del sur la acariciaba, las flores reían de felicidad a su paso, y todos los animalitos del parque cantaban canciones de amor y felicidad. Tania ya no lloraría más de soledad.

Un día ocurrió algo maravilloso. Paseaba Tania con sus padres por el bosque y encontró a la ya vieja cigüeña María. La llamó y le dijo que la llevara otra vez en sus alas y, como ya conoce a sus papás, a ver si podría ponerla dentro del vientre de su madre, que lo acariciara su papá, y así ella sería de nuevo un bebé, tendría la dulce leche del pecho de su padre, crecería, y viviría en el mundo de felicidad que a todos los niños les corresponden. La cigüeña María, sorprendida, la escuchó atentamente. Y después de pensar un momento le dijo: “mira Tania, Dios escribió tu destino, lo que será tu vida, y para eso se valió de una apasionada y joven cigüeña, de un largo y alocado viaje, de una mamá y papá que desde la distancia te buscaban, y así en su infinito amor. Levantó con mimbres de caricias y perfumes de rosa tu hogar, para siempre, y Dios se siente feliz solamente conque por las noches les dé las gracias por la vida y un minuto del día te acuerdes de su eterno amor.
FIN

La Mujer de los Bolsillos. Cuentos infantiles para tu hijo pequeño

Aquella noche Raquel no quería dormir, no tenía nada de sueño y se pasó toda la noche llamando a su madre: ¡Mama, traeme agua! ¡Mama tengo pis! ¡Mama no puedo dormir! -¡Raquel, haz el favor de dormir que mañana no te podrás levantar! ¡Mira que si no te callas vendrá la mujer de los bolsillos
! - ¿La mujer de los bolsillos? ¿ quién és esa mujer?
- Preguntó Raquel asustada.
- La mujer de los bolsillos ha existido desde que yo era pequeña. Dicen que se pasea por las calles, y cuando oye a un niño llorar, gritar o protestar, se sube a las ventanas de las casas y se lo lleva dentro de uno de sus bolsillos.
- ¿Y dónde vive la mujer de los bolsillos?
- Creo que fué Jaime el policía el primero en ver su escondite. Una casa en ruinas justo en medio del bosque de la Luna Pálida. Allí vive con diez gatos pelones, tres perros pulgosos, cinco gallinas desplumadas, una rana i una lagartija.
- Mama... ¿ Y cómo es la mujer de los bolsillos?
- Yo no la he visto nunca, pero dicen que es una mujer muy súcia, tiene el cabello colorado, largo y enredado, los ojos pequeños, la nariz larga, la cara llena de granos y le faltan la mitad de los dientes.
- ¿Y porqué odia tanto a los niños?
- Siempre ha sido muy antipática. Nunca le han gustado las criaturas. Desde que era pequeña, cuando iba a la escuela, todos se reían de su abrigo lleno de bolsillos. Era una niña solitária que sólo hablaba con los animales, y eso la comvirtió en lo que ahora és: una bruja.
"Mañana iré al bosque de la Luna Pálida a ver si todo lo que me ha dicho mama es verdad" - Pensó Raquel mientras su madre le daba un beso de buenas noches.
Se lo diría a David, seguro que el le acompañaría.

Y así fue al día siguiente los dos caminaros y caminaros por el bosque hasta que por fin, entre los árboles encontraron la casa. Pero la casa ni estaba en ruinas ni era tenebrosa. En la puerta había una mujer con un gatito en brazos, pero ni era fea y no parecía antipática. Hasta tenía cara de buena persona. Raquel y David se acercaron a la mujer despacio y asustados, pero enseguida se dieron cuenta de que no era peligrosa.
- Bienvenidos a mi casa
.- Dijo la mujer con una gran sonrisa.
" No le falta ningún diente" - Pensó Raquel.
- ¿E...e... eres la mujer de los bolsillos?- Preguntó David balbuceando.
La mujer dijo que sí con la cabeza. - Pero si tienes una casa muy bonita, y no pareces una bruja.- Aseguró Raquel
.- ¿ Por qué todo el mundo te tiene miedo?
- ¿ Y te pones a los niños en los bolsillos?
La mujer empezó a reirse sin parar, y les enseñó lo que llevaba dentro de los bolsillos: solo eran caramelos de todos los gustos, piruletas, chocolatinas, regaliz, bombones, todas las golosinas que os podáis imaginar. Que equivocada que estaba su madre. María, que así se llamaba , era la mujer más dulce que nunca había conocido.
Raquel tenía que resolver aquella injusticia, María merecía ser conócida por todos en el pueblo, adultos incluidos, así nunca más asustarían a los niños con su persona.

Lo primero que se le ocurrió fué reunir a todos los niños y niñas en la plaza mayor para que la conocíeran. María repartió caramelos y sonrisas a todos aquellos que se le acercaban, pequeños y grandes. Y a partir de aquel día, la mujer de los bolsillos fue querida por todos, y ya nádie le tuvo miedo.
FIN

Mariposa Bella

Cuenta la historia que en un día de primavera todos los animalitos del bosque se preparaban para una gran fiesta.

Todos estaban invitados y querían ponerse muy lindos; pero Bella la mariposa se creía muy superior a sus amiguitos. Decía que no iba a ir al baile porque no tendría alguien con quien estar y que estuviera a su altura, o que fuera tan hermosa como ella, y tan inteligente.

Todos los animalitos se prepararon, con adornos de flores, ramitas, sombreritos y muchos colores. Tanta dedicación se debía a que en el baile encontrarían pareja para formar sus hogares y familias.

Bella, la mariposa, decía que no se iba a poner nada porque ya era muy linda.
Cuando llegó el momento todos fueron al baile y Bella para no quedarse sola también se fue.

El gran salón estaba decorado con hermosas luces, guirnaldas y un gran espejo que era el centro de la fiesta. Todos bailaban contentos y se divertían. Bella encontró a un ser precioso pero que no hablaba, no pensaba, solo sonreía si ella lo hacía, y le saludaba cuando ella también lo hacía.

Los animalitos comenzaron a reírse de Bella, pero ella no les hizo caso y siguió encantada con esa persona fascinante.

Fueron pasando las horas y todos encontraron pareja y se iban a sus casas muy contentos.
Y cuando ya no había nadie en el salón, Bella desesperada se dio cuenta de que el ser fascinante que había estado con ella toda la noche, era su propio reflejo en el gran espejo del salón.

Bella llorando se dio cuenta que había estado toda la noche con un ser frío y sin vida, que era muy hermoso pero que no le podía brindar nada, y ya se había quedado sola.

¡NO SEAS COMO LA MARIPOSA BELLA, QUE POR TANTO QUERERSE SE QUEDÓ SOLO CON ELLA! MAS VALE MIRA A TU ALREDEDOR Y DISFRUTA DE TODO CON MUCHA PASIÓN.
FIN

El deseo de Jalid. Nuevo cuento infantil

Esta es la historia de un niño que sabía que no era una persona adulta. A la infancia no se le han reconocido sus derechos hasta el siglo pasado, tampoco a los niños y las niñas se les han tratado como a tales sino como a "personas adultas en miniatura sin derecho a ser escuchadas.

Me llamo Jalid. Nací en Toledo en el año 1436. La llaman "la Ciudad de las Tres Culturas" porque viven judíos, castellanos y árabes. A mí eso me gusta mucho porque puedes estar horas y horas viendo a gente pasar con ropas diferentes; transportando comidas diferentes; hablando lenguajes diferentes. Nadie choca con nadie y si se cruzan sus caminos, se regalan sonrisas que valen más que mil palabras. Yo soy bastante feliz, no puedo quejarme por la vida que tengo.
Desde la ventana de mi cuarto se ve el puente de Alcántara; en la mesa de mi casa siempre hay cous cous; hasta he aprendido a leer y escribir. Pero a veces pasan cosas que no entiendo y que me gustarían que cambiasen. En una ciudad como Toledo lo veo menos, pero en cuanto sales de Toledo por la Puerta del Sol...

Mi padre es alfarero. Vende sus vasijas, platos y otros cacharros por los pueblos de la Mancha. Yo le acompaño y le ayudo. A veces mientras vamos por los caminos, me siento en la parte de atrás del carro y miro. Miro a la gente que pasa y veo todo lo que pasa. Veo a personas de mi edad caminando con los pies desnudos, cargando sacos más grandes que ellas. Veo a mujeres muy jóvenes llevando un recién nacido en sus brazos. Veo a mucha gente trabajar en los campos de sol a sol. No se quejan, nadie se queja. Cuando llegamos al mercado veo a hombres y mujeres comprando acompañados por sus hijas e hijos. Se nota que los quieren, pero me llama la atención que ni las niñas ni los niños eligen las frutas, pero sí cargan con la compra, pero sí limpian a los animales, pero no me miran a los ojos. Tampoco me hablan y no puedo adivinar lo que piensan.

Al caer la tarde, cuando se termina el mercado, regresamos a casa y sino esperamos en el pueblo a que llegue el día siguiente. A mí me gusta quedarme en los pueblos porque así puedo descubrir cosas maravillosas en las mercancías de los demás vendedores, en las calles e incluso puedo conocer a gente nueva. Y es que el mayor tesoro que he descubierto es la amistad con otros niños y niñas que como yo viajan, ven y además, hablan. Podemos pasarnos toda la noche contándonos cosas que escapan al ojo de las personas adultas y es que los niños y niñas somos como los gatos en la noche. Lo vemos todo.

Una noche de luna llena, alguien dijo - Y eso qué cuentas, ¿lo has hablado con tu padre? - Se hizo el silencio y todos nos dimos cuenta de que no hablábamos con las personas adultas. Nunca nos habíamos planteado que existía la posibilidad de que nos escuchasen.
Hoy cumplo nueve años. Mientras vamos en el carro camino de casa, pienso en el recibimiento que me harán. Sé que mi madre habrá preparado mi comida favorita; que mi abuelo m habrá construido un juguete; que mi hermana mayor me contará mi relato preferido. Lo que no sé es si mi padre me hará el regalo que más deseo.

- Papá, me gustaría contarte una cosa.
- Habla Jalid, te escucho.
Lo ha hecho. Mi padre, sin saber que es el mejor regalo que me puede hacer, me ha regalado su escucha. Gracias papá por tratarme como a un niño con voz.
FIN

Lito, el sapo vanidoso

En la transparencia de una profunda y tibia laguna, donde se escuchaba la hermosa melodía del vaivén de las aguas, el cantar del viento y el ritmo del caminar de los animales, se encontraba un sapito muy alegre y coquetón, saltando de roca en roca entonando una canción, era Lito el sapito juguetón.

Cada día al levantarse, se daba un chapuzón y se posaba en una roca cantando una canción. Soy un sapito Tan lindo y juguetón Que nadie me iguala Cantando una canción ¡Que hermoso día!, ¿A quien conquistaré hoy? Nadie se resiste a mi belleza, ni a mi inteligencia, soy un sapo tan fino que todo puede, y no necesita a nadie, pero todos necesitan de mi, ¡soy lo máximo!.

El sapito se colocó el sombrero rojo en la áspera cabeza y un perfumado clavel, y mirándose en la transparente laguna, exclamó: ¡Que guapo y hermoso soy! Que aroma exhalo hoy, todos me aclamarán y me aplaudirán, cuando me vean pasar.

Lito inició su caminata por el campo y se encontró con una mariposa de bellos colores, a quien miro con indiferencia. Nina la mariposa lo observaba sonriendo. -¡Hola Lito! Que guapo y perfumado vienes.
-Así soy yo, respondió el sapo sin mirarla.
Nina, muy coqueta, preguntó:
-¿Te gusta mi nuevo color y el brillo que tengo en mis alas? Lo adquirí con ayuda de las flores, del viento y del sol.
-Yo soy hermoso sin ayuda de nadie - respondió el sapo.
La mariposa muy triste y enojada se alejo.

Un gusano que lo miraba con temor le gritó:
-¡Lito, que bien hueles hoy!
-Así soy yo, sin ayuda de nadie -respondió.
El tembloroso gusanito que se escondía entre las hojas, sonrió y se cubrió.
Mientras tanto, el sapo muy altivo de un salto aplastó a una indefensa flor.
-¡Ay! -dijo la rosa-, ten cuidado señor sapo que me has hecho daño al darme un pisotón. Cómo con tan grandes ojos eres cegatón.
El sapo enfadado respondió: Ciego no soy, no me gusta que nadie se cruce en mi camino, favores no doy, todos necesitan de mi y yo no necesito de nadie.
-Que suerte tienes - dijo la rosa-. Yo para tener mi color necesito de la tierra, el agua, el sol, y el perfume me lo dió Dios.
Y el sapo indiferente al dolor y lágrimas de la rosa, se fue saltando de flor en flor, sin darse cuenta que una noria estaba abierta y al fondo cayó.
-¡Auxilio! ¡Socorro! Ayudenme, un sapo como yo no debe morir.

La mariposa que lo escuchaba, se acercó y preguntó
-¿Quien anda allí?
El sapo, gritando, dijo:
-Soy yo, Lito, sácame de esta profundidad.
-Tú lo puedes todo, salta y salta y a la cima llegarás - le respondió la mariposa en tono burlón.

La rosa que estaba escuchando le dijo.
-Salta Lito, salta, que de salto en salto a la superficie llegarás, tú lo puedes todo y no necesitas de nadie, de lo contrario yo te ayudaría.
El sapo llorando su vanidad y viéndose perdido, gritó con mucho esfuerzo. -¡Ayúdenme, por favor! El gusano asomó su cabeza y moviendo su flácido y débil cuerpo gritó:
-¡Lito, salta, salta que a la cima llegarás, tú lo puedes todo, no necesitas de nadie, demuéstralo! Como el sapo, apenado y avergonzado, decía ya en voz baja: -¡Ayúdenme, por favor! Todos al mismo tiempo respondieron.
- Salta, salta que a la cima llegarás, tú no necesitas de nadie, ja, ja, ja -y todos se reían del frustrado Lito.

El sapo hizo nuevamente el intento de saltar, pero todo fue inútil porque el pozo era tan profundo que por más que saltaba no llegaba al borde. Nina la mariposa, el gusanito y la rosa, al escuchar los gemidos del derrotado sapo, se compadecieron y lo ayudaron a salir. Soy un sapito Tan lindo y juguetón Que aprendió una lección.
FIN

(Este cuento nos fue enviado por Azucena Chena - España

Me gusta como soy

Había una vez, un chico que tenía el pelo color blanco, pero blanco-blanquísimo, como la nieve, como la crema, como el algodón. Nació un día de sol brillante. Los papás estaban tan contentos que no dejaban de sonreír, y a todos les comentaban emocionados, lo hermoso que era su bebé.
Cuando salieron del sanatorio, los rayos de sol iluminaron la cabeza de Ezequiel, y la mamá le dijo al papá - Mirá, parece un angelito - Sí, es el bebé más lindo, del mundo- contestó radiante, el papá. Así creció Ezequiel, contento, querido y orgulloso de su pelo blanco, blanquísimo.

Vivió en el campo hasta que tuvo 5 años, allí se crío jugando con los animales, alimentando a las gallinas y sus pollitos, hasta aprendió a andar en un caballito, que el papá le regaló, especialmente para él, al que le puso de nombre Petiso, y se convirtió en su mejor amigo. Una noche llena de estrellas, Ezequiel escuchó que los papás conversaban en la galería de la entrada de su casa. Se acercó despacito porque los notó preocupados, al verlo los papas le dijeron que era muy tarde y debía ir a dormir. Ezequiel queda tan intrigado, que se escondió detrás de la puerta para escuchar. !!! Que sorpresa se llevo ¡!!!!. Los papas estaban hablando de mudarse, ¿ mudarse? ¡SÍ! Ir a vivir a otra casa, nada más ni nada menos que a la ciudad, y todo el asunto era porque Ezequiel tenía que empezar a ir a la escuela, y por allí donde vivían no había ninguna cerca. ¡QUE ALEGRÍA ¡ conocer la ciudad tener nuevos amigos, eso si que parecía divertido. Así fue que juntaron sus cosas y se mudaron a una linda casita en la ciudad que quedaba muy cerquita de una hermosa escuela con sus paredes pintadas con dibujos que habían hecho los chicos junto con las maestras.

Ezequiel estaba tan entusiasmado, que no podía quedarse quieto. Fue con su mamá a comprar el guardapolvo y los útiles escolares, él eligió todos con la marca de su cuadro favorito. Esa noche casi no pudo dormir, de tan entusiasmado que estaba. Entonces llego el día tan esperado, ¡el primer día de clases!. Ezequiel se levanto muy temprano, contento y nervioso. Se lavo la cara, los dientes y se peinó su blanco-blanquísimo pelo blanco. Ese pelo que era su marca especial en la vida, ese pelo que su mamá acariciaba todas las noches antes de que se duerma, su hermoso pelo de nieve, como le decía su papá. Llegó a la escuela junto con sus papás, lo besaron en la entrada, y Ezequiel con paso decidido se acercó al patio a la fila de primer grado. Allí se empezó a sentir raro, todos los chicos lo miraban, no solo los de su grado, de todas las filas los grandes, los chicos, y Ezequiel no entendía porque, quería que lo tragara la tierra. De pronto un chico se acercó y le dijo - Che, porque tienes el pelo así?- Ezequiel, no contestó, no sabía que decir, se preguntaba -¿así cómo, lindo como la nieve?.- Ante su silencio todos lo miraron, algunos empezaron a reírse y otros a cargarlo, le gritaban: - cabeza de crema, cabeza de papel, cabeza de azúcar!! Ezequiel miró a su alrededor y de pronto, con espanto descubrió que, no había ningún chico con el pelo blanco-blanquísimo como el suyo y parecía que esto les molestaba a los chicos de la escuela. Lloro en silencio, como para adentro, ya no le gustaba la escuela, se sentía triste y quería volver a casa.
La seño los saludo uno a uno con un beso y los llevó hasta el aula de primer grado. El aula era lindísima, estaba decorada con los nombres de todos los chicos, con dibujos, letras y números. Pero Ezequiel estaba tan triste que no podía ver lo linda que era su aula, solo quería llorar y salir corriendo. Se sentó solo, nadie quiso sentarse con él, porque todos pensaron que su color de pelo lo hacía un chico raro.

María Luz, la seño, les dijo que iba a tomar lista, que a medida que los nombrara fueran parándose al lado de su silla. María Luz comenzó - que se paren los altos- los chicos desorientados se miraron – vamos, dijo la seño, párense los altos- Los chicos se pararon. La seño siguió diciendo, ahora los petisos, los de pelo color rojo, los que usan anteojos, los que no usan anteojos, los morochos, los pálidos, los que tengan aparatos, los de pelo blanco, los de pelo marrón, los que tengan dientes chiquitos, los de dientes grandes, los que se portan bien, los que se portan mal, los simpáticos, los tímidos, los charlatanes, los calladitos y así siguió con una lista interminable.

Los chicos no hacían más que pararse, sentarse y volverse a parar, porque todos, todos, todos, se sentían nombrados varias veces. Algunos eran bajitos, charlatanes, de pelo amarillo y a veces se portaban mal. Otros eran calladitos, altos, de dientes chiquitos y simpáticos. Todos tuvieron que levantarse tantas veces que quedaron agotados. Pero faltaba lo último. María Luz dijo – ahora que se paren, los que quieran divertirse, los que quieran aprender, los que quieran hacerse amigos, los que quieran jugar, los que quieran reírse- Se imaginan lo que pasó, ¡SIII! Se levantaron todos juntos, gritando yo, yo, yo, yo, seño. Entonces, María Luz dijo.- No importa las diferencias que tengamos, miremos que tenemos en común para así poder respertarnos y pasarla bien todos juntos. Ezequiel, había dejado de llorar. Otra vez se sentía contento y con ganas de estar en la escuela. De pronto se acerco un chico y le pregunto si podía sentarse con él, Ezequiel le contesto que sí. De ahí en más, lo que conozco de esta historia es que Ezequiel se hizo muchos, muchos amigos, y otra cosa que me contaron, es que cuando había que actuar de Papá Noel, siempre lo elegían a él, lo que lo hacía sentirse muy, pero muy orgulloso de haber nacido con ese pelo blanco- blanquísimo.
FIN

(Este cuento nos fue enviado por Lic. Sonia Almada - psicóloga infantil

Don Arbolón. Cuento enviado por una madre

Comentario: Había una vez un colegio que se llamaba "Los Árboles?, ¿Sabéis porqué?, pues porque tenía su patio lleno de árboles. Los había chiquititos.., también medianitos, grandes ...pero había uno que era enorme, un viejo árbol que estaba justo en mitad del patio. Se llamaba Don Arbolón y ocupaba aquel espacio desde mucho antes de que se construyera el colegio.

Don Arbolón quería mucho a todos los niños que habían pasado por aquel colegio y los niños le querían mucho a él. Bajo su sombra los niños descansaban, merendaban, jugaban a cromos, se contaban hasta sus secretos más grandes.... Y Don Arbolón, impasivo, siempre acariciaba con la sombra de sus ramas a aquellos niños que tanta compañía le hacían y tanto confiaban en él.

Un día Don Arbolón apareció malito, con un gran agujero en su tronco y habiendo perdido todas sus hojas. Las señoritas del colegio, preocupadas, llamaron corriendo a unos señores jardineros, quienes con muy poco amor a la naturaleza y sólo con ganas de ganar dinero, ni tan siquiera se preocuparon por Don Arbolón, y al verlo tan viejecito propusieron arrancarlo y plantar en su lugar muchos árboles jóvenes.

Los niños cuando oyeron aquello, sin premeditarlo, se levantaron de golpe y cogiéndose de sus manitas rodearon a Don Arbolón cantando "Don Arbolón no se va del colegio...don arbolón se queda aquí...porque todos los niños... queremos mucho a don arbolón".

Las señoritas inmediatamente echaron a aquellos señores y llamaron a un viejo jardinero que vino muy deprisa con una gran maleta. Cuando vio a don arbolón, le tomó la temperatura, la presión, le miró la garganta.... y al ratito dijo, "necesito tierra para prepararle su medicación" Los niños corriendo fueron a por tierra y en un gran cubo se la trajeron. El viejo jardinero mezcló con la tierra jarabe, gotitas, unos polvos y lo extendió todo en el suelo rodeando a don arbolón, dándole unas cariñosas palmaditas en su tronco al marchar.

Todos se fueron a casa preocupados por don arbolón y cuando llegaron al día siguiente ¡sorpresa!, don arbolón ya no tenía aquel enorme agujero en su tronco y todas las hojitas habían vuelto a brotar en sus ramas. Los niños, muy contentos, rodearon nuevamente con sus manos a don arbolón y con mucha alegría cantaron: "don arbolón ya no está malito, don arbolón se ha curado ya, todos los niños, queremos mucho a don arbolón".

Don arbolón sonrió a su manera, haciendo un simpático movimiento de todas sus ramas y el sol que iluminaba el patio del colegio brilló con mucha más intensidad, participando de aquella alegría que inundó aquella mañana el colegio "Los Árboles".
FIN

(Para mí hijo Alejandro)
(Este cuento nos fue enviado por Lidia - Barcelona - España)

Cuento infantil sobre la adopción de un hijo

Era una tardecita de invierno, hacía muuucho frío y llovía furiosamente. El viento soplaba, soplaba y soplaba... Sentados al lado de la chimenea, los nenes, María, Javier y Teresa comían con placer los bizcochitos calentitos que les ofreció su abuela. Teresa... coqueta, moviendo la cabeza y arreglándose sus trencitas, preguntó:
- Abu, y Lucas... ¿Por qué no vino hoy?
- Está enfermito - contestó la abuela.
- Pero igual lo tenemos con nosotros...
- ¿Y dónde está? - preguntaron los chicos, asombrados, mirando a su alrededor.
- Aquí, junto a mi corazón...- y con un movimiento rápido descubrió una carta que tenía oculta dentro de su blusa, y enseguidita la volvió a guardar junto a su pecho.
Los chicos estaban tan intrigados, que empezaron a gritar:
- ¡Dale, abu, leela, leela!
La abuela, misteriosa e inquieta, respondió:
- No sean impacientes... vamos a leer la cartita más tarde.
Javier y Teresa asintieron con la cabeza, pero María, la más chiquita, caprichosa y enojada, exclamó:
- Entonces... ¡¡queremos que nos cuentes un cuento... ahora mismo!!
La abuela, aliviada, afirmó:
- Me encanta contarles cuentos cuando llueve... ¿Están preparados?
- ¡Síiii!- respondieron los chicos.
- Bueno... ¡Escúchenme con cinco orejas y mírenme con veinte ojos..! Como todos los jueves, hoy les voy a contar un cuento... Pero en esta historia no va a haber ni duendes, ni brujas, ni princesas... Hoy les voy a contar un cuento real... un cuento-secreto... – murmuró despacito.
Con dulzura, la abuela invitó a María, su nieta menor, a sentarse en su regazo, y después de un laaaargo y misterioso silencio, que a los chicos les pareció rarísimo, comenzó su relato: ¿Recuerdan cuando María todavía estaba en la panza de mamá...? Era un día como el de hoy : muuuy lluvioso y frío. Por la noche nos reunimos todos en la casa del Tío Pepe y la Tía Luly para conocer al nuevo primito... Y allí estaba él: Lucas, un precioso bebé, chiquitiiito, flaquito, sonrosado y llorón, en brazos de la tía Luly, tomando su mamadera como un gran comilón. El tío Pepe -calladito como siempre- lo miraba embelesado, y la tía Luly lucía orgullosa y oronda, como una reina feliz. Estaban tan contentos... ¡Por fin se habían reunido con su hijito..!
¡Sí¡¿Qué hicimos?
- Al verlo a Lucas bebé, corrieron rapidito a acariciar la panza gorda de su mamá. Y allí adentro estabas vos, María, dando pataditas, como diciendo : ¡Aquí estoy, ya crecí, ya quiero salir, para jugar con mis hermanos y mi primito!.
-Abuela, ¿y por qué yo daba pataditas? - preguntó María, muy preocupada. -¿A mi mami no le dolía?
FIN
(Este cuento nos fue enviado por la Lic.Dora Kweller - Argentina

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